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Juré que te esperaría toda una vida, que siempre me buscaras estaría allí, que mi alma no desestiría si tardabas en volver, que siempre me tendrías para todo, que podrías confiar en mi, que nunca me apartaría de tu lado, que haría hasta lo imposible porque me quisieras tan solo un día como yo a tí, que moriría al ver que te alejabas, que si me dieran a elegir entre el paraíso y un minuto en tu boca te escogería a tí aunque eso supusiera perderme en el hastío, que ni los meses, ni los años harían que me olvidara de tí, que saldría a buscar estrellas para iluminar tus noches oscuras, que te prestaría mi cuerpo para que vivieras en el si fuera necesario, que cada amanecer llevaría el sol a tu ventana para darte los buenos dias, que jamás querría a nadie como te quise a tí, que aunque pudieras verme en otros brazos, serían los tuyos los que buscaba sin descanso, que podría haber otros en mi mente y que compartiría dias y noches con ellos llenas de ternura y quizás de pasión, pero que cada vez que cerraba los ojos al besarles sería tu rostro el que viniera fugaz a mi mente, juré y juré y prometí por tí cosas que solo eran posibles porque solo tú me dabas la fuerza para realizarlas, aunque nunca hayas estado a mi lado, aunque nunca me hayas querido, aunque pase el tiempo y cada día estés más lejos, nunca voy a olvidar el juramento de seguir tus pasos donde vayas, aunque tu vayas solo, o con otra, o con muchas, aunque pasen mil años y rehaga mi vida sin acordarme apenas de tí, no sé romper una promesa,quizás tampoco quiera.