Dicen que hay amores que matan y que, precisamente esos son los que nunca mueren, NO ES ASÍ, hoy, después de varios meses sin viajar por mi mente, por miedo a encontrarme con el letrero que tenía escrito con luces luminosas y mayúsculas su nombre, he decidido hacerlo y reflexionar de cómo ha cambiado mi vida desde hace un año , y no,por suerte ese cartel ya no está, o al menos yo no lo he visto, supongo que la pena fundiría sus malditas luces rojas y que el desencanto se lo comió de un sólo bocado, en su lugar he encontrado algo que creí haber perdido entre sus sábanas un típico fin de semana de los que pasaba junto a él, algo llamado amor propio, cuando lo vi me estaba sonriendo, tenía ganas de verme, de encontrarme feliz y dispuesta a ser quien soy ahora, me ha dado la enhorabuena por haberme desprendido del lastre que llevaba conmigo y que tanto le pesaba a mi alma (pobrecita, que paciencia ha tenido), le pregunté que por qué se fue, por qué me dejo tirada , por qué permitió que ese "hombre" me hiciera polvo y me sorprendí al oír su respuesta:
-Querida, el que espera se desespera y estuve meses chillándote al oído para que te dieras cuenta de que estaba aquí, pero el amor es ciego y los oídos con él se vuelven sordos y nunca me hiciste caso, así que como me encontré un poco cansado y afónico decidí esperarte aquí para cuando decidieras volver.
Y si, por fín he vuelto a dejarlo entrar en mi vida, cómo te quiero amor propio, cómo me quiero, prometo no dejar que te vayas nunca más, y juro solemnemente poner una lápida a cualquiera que se atreva a alejarte de mí.
BPP
Felicidades ,habeces nuestro carácter nos hace meternos en problemas, pero es nuestro orgullo el que nos mantiene en ellos.
ResponderEliminarme he pasado por aquí a leerte un rato,
la letra de tu blog es un poco pequeña,me he dejado los ojosss jajaja
un saludo de corsario
Soy el capitan de la nao corsaria socrates y
ResponderEliminarme gustaría que te unieras a mi tripulación