Hoy he reflexionado sobre lo complicadas que somos las mujeres y la facilidad que tenemos para ver o escuchar lo que queremos. De tal manera, que "posibles" señales las interpretamos como "seguras" señales, si el me mira la boca, es seguro que quiere besarme, y a lo mejor era porque te estaba mirando que tus dientes no son perfectos, o que te pintas demasiado los labios. Si el tarda en contestar, es porque se esta haciendo el interesante y quiere ponerme nerviosa, pero no querida, seguramente le importarás tan poco, que lo que está haciendo es más importante que tú. Y lo mejor, es cuando pensamos, seguro que tiene miedo, lo ha pasado mal en otras relaciones, y no quiere enamorarse de mí, porque es totalmente imposible que no lo haga, pues no cariño, seguramente no hayas tocado su fibra sensible, y por eso no te demuestra nada más. Y bueno ya ni que decir, de lo maravillosas amigas que somos todas, que no somos capaces de decir: "Olvidalo, que no le gustas, pasa de él". Es más fácil alimentar el ego de nuestras amigas diciéndole: "tia yo creo que si le gustas, porque sino no haría eso" o "Fulanita de copas, seguro que le gustas, pero a lo mejor quiere conocerte un poco más y no arriesgarse". ¿Por qué no somos claros, directos y concisos? Si le gustas, te lo va a demostrar, y si por algun caso remoto, hiciera algo de lo anterior, no merece la pena. Nadie deja escapar lo que quiere tan fácilmente.

BPM